¡Ya se respiran aires de primavera!
Hay días, como hoy, en que se antoja pensar en cosas que no den la impresión de que el fin del mundo se acerca a pasos cada vez más veloces. Por eso, hoy quiero ofrecerte una “tentazione” (así nos dijo un experto vendedor de cristal en Murano) que se antoja irresistible.
Entre libros, de repente me pongo a leer sobre cosas de cocina. Y me encontré con una trivia que me llamó mucho la atención, así que no me quedó de otra más que ponerla en práctica:
Resulta que la piña contiene bromelina, que es una enzima que puede disolver los tejidos fibrosos del músculo, por lo que se usa en la industria alimenticia como ablandador de carnes. Cuando vi la palabra “fibrosos”, me quedé pensando… “el pollo puede llegar a ser bastante fibroso…”
Así nació esta receta, que se convirtió a la primera probada en un favorito instantáneo: El pollo con pico de piña (al principio, quise poner “pollo con pico de gallo de piña”, pero sonaba demasiado estrambótico).
Una nota antes de empezar: marinar el pollo en piña (y por lo tanto en bromelina) puede llegar a alterar drásticamente su textura, haciéndolo a la vez más blando y más “esponjoso”. Sé que esto no es para todos los paladares, ¡pero a nosotros en casa nos pareció delicioso!
INGREDIENTES:
3 pechugas de pollo, limpias y sin hueso ni piel, cortadas en cubos
1/4 parte de una piña pequeña
3 cdas azúcar morena
2 cdas vinagre blanco o de arroz
1 cda salsa de soya
1 cda salsa de pescado (opcional)
2 cdas aceite de oliva
1 cdta sal
1 cdta ajo en polvo
1/2 cdta chile de árbol seco y pulverizado (opcional, pero el toque picante le agrega complejidad al plato)
Pimienta negra al gusto
1/2 cebolla morada picada finamente
3-4 ramas de cilantro, picadas finamente
PREPARACIÓN:
Ralla un pedazo de la piña con la parte más fina de un rallador, hasta obtener unas dos cucharadas de pulpa, con todo y su jugo. Corta el resto de la piña en cubitos.
Para preparar la marinada: combina azúcar, vinagre, salsa de soya, salsa de pescado, aceite de oliva,sal, ajo, chile y pimienta. Batir hasta emulsionar (adquirirá la textura de un aderezo para ensaladas con un poco de “arena” por el azúcar).
Combina los cubitos de piña con la cebolla y el cilantro, agregar una cucharada de la marinada y mezcla para incorporar. Reserva aparte, éste es el “pico de gallo de piña”.
Al resto de la marinada, agrégale la pulpa de piña, con su jugo, bate y agrega el pollo, mezclando para impregnar. Deja marinando durante 15 minutos a temperatura ambiente. OJO: si se te pasa el tiempo de marinado, puede ser que la bromelina termine desbaratando el pollo, ¡así que no lo dejes marinando por más de 15 minutos!
Minuto y medio antes de que termine de marinarse el pollo, calienta suficiente aceite en una sartén grande a fuego medio-alto. Luego, con un cucharón ranurado, saca el pollo de la marinada y pásalo directo al sartén. Deja que dore sin moverlo, unos 3 a 4 minutos.
Reduce a fuego medio y sigue cocinando el pollo unos 5-7 minutos más, mezclando ocasionalmente, hasta que el pollo esté bien cocido.
Sirve sobre una cama de arroz blanco al vapor y acompaña con el pico de piña.
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